- el guepardo
Es un felino de gran tamaño; mide entre 110 y 150 cm de longitud, más de 55 a 80 cm de la cola Su altura a la cruz es de 74 a 90 cm y pesa entre 35 y 60 kg, siendo los machosligeramente de mayor tamaño que las hembras.
Acostumbrado a que los carroñeros de mayor envergadura o fuerza (como la hiena, el babuino o incluso el león o el leopardo) le roben las piezas que caza, el guepardo se ha habituado a cazar en las horas centrales del día, cuando los otros depredadores duermen. Su estructura física adaptada a la velocidad limita su capacidad de lucha y defensa, ya que su cuerpo es esbelto y fino a expensas de una musculatura potente y la fuerza en sus zarpas lo limitan al momento de enfrentarse a un oponente con dotes más defensivas. Así, es probable que el guepardo sufra una fatal derrota. Por este motivo se retira antes de que esto suceda y de este modo evita ser herido. A la hora de cazar, evita también la presencia de los turistas, que, en otros momentos menos calurosos del día, suelen estorbar con su curiosidad en el momento decisivo de la caza. El calor hará más corta su carrera, y luego todavía tendrá que arrastrar la presa hasta un escondite a la sombra donde quede a salvo de los demás.
Tiene una vista privilegiada, que aprovecha para observar a sus víctimas desde la distancia, tumbado en un promontorio o subiéndose a un árbol. Es paciente y tranquilo; sabe escoger su presa y esperar el momento adecuada Guepardo corriendo.
El guepardo no se precipita durante la caza. Otros depredadores, como el león cuando está hambriento, desperdician energías corriendo sin mucho tino detrás de las presas. El guepardo, en cambio, espera. Y cuando finalmente empieza a correr, acierta en la mayoría de las ocasiones. Su efectividad se ha estimado en un 60 %, frente a poco más del 25 % que consigue el león[cita requerida]. El guepardo logra entre 150 y 300 presas anuales, frente a las 30 o 40 que consigue el león.[cita requerida]
A diferencia del resto de los felinos, sus uñas no son retráctiles sino que le sirven para aumentar la tracción. Puede alcanzar velocidades de hasta 115 kilómetros por hora, pero durante su formidable carrera no puede mantener esta velocidad más de 500 m. Se han verificado velocidades en los guepardos de más de 114 kilómetros por hora, pero en casos muy aislados. La velocidad media del guepardo oscila entre los 98 y los 108 kilómetros por hora.
Suele cazar gacelas e impalas, aunque también atrapa crías de otros mamíferos, especialmente de ñu y cebra.
Escoge la táctica de caza en función del terreno y la situación. Si el terreno le permite acercarse sigilosamente, pondrá en práctica toda su habilidad de felino para atacar desde lo más cerca posible, y aprovechar luego la desbandada para lanzarse sobre la víctima más cercana ignorando al resto.
Cuando el terreno es demasiado regular, estudiará la situación desde lejos esperando que algún adulto se retrase o buscando un ejemplar más vulnerable que el resto. Si no tiene más remedio, también puede comenzar la carrera desde lejos, manteniendo una carrera de fondo que separe del grupo a alguna hembra en gestación o a alguna cría a la que atacará enseguida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario